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jueves, 14 de enero de 2010

En 2010, ni obra ni proyecto que festejar

(Milenio): “En 2010, ni obra ni proyecto que festejar”: Lillian Briseño

El Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución en México encuentran a nuestro país sin un proyecto de nación y sin una obra pública que sea un referente para los mexicanos, como en su momento lo fue la Torre Eiffel a los 100 años de la Revolución francesa, la Estatua de la Libertad en el centenario de la Declaración de Independencia de EU o el Ángel de la Independencia a los 100 años de ésta en México.

Hoy no hay nada de eso, afirma la directora de la División de Humanidades y Ciencias Sociales del Tec de Monterrey, Campus Santa Fe, Lillian Briseño.

La especialista en historia defiende lo que en su momento construyeron hombres como Porfirio Díaz o Antonio López de Santa Anna. Afirma que el primero tuvo una visión universal del desarrollo y en la antesala del Centenario de la Independencia construyó grandes palacios, vialidades y promovió inversiones. Ese fue su lado positivo.

El segundo no desarrolló obras pues el país estaba en bancarrota, pero promovió referentes nacionalistas, como la instauración del Grito de Independencia la noche del 15 de septiembre y el Himno Nacional. Además de que le dio “una abrillantadita a la ciudad”.

La historiadora describe el crecimiento del país y más de la Ciudad de México, hasta concluir que la ha desbordado. No hay proyecto de ciudad, no hay obras, no hay nada, dice. Leer Nota Completa...

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